Cómo prevenir la irritación después de afeitarte
4093
post-template-default,single,single-post,postid-4093,single-format-standard,bridge-core-2.4.5,ajax_fade,page_not_loaded,,qode-title-hidden,qode_grid_1300,hide_top_bar_on_mobile_header,qode-child-theme-ver-1.0.0,qode-theme-ver-23.0,qode-theme-bridge,disabled_footer_bottom,qode_header_in_grid,wpb-js-composer js-comp-ver-6.3.0,vc_responsive,elementor-default

Cómo prevenir la irritación después de afeitarte

Reducir la irritación después del afeitado

Una de las situaciones más desagradables de la rutina de cuidado diario seguro que la vives después de afeitarte, ¿verdad? La sensación de irritación después del afeitado es más común de lo que crees ya sea porque tienes la piel más sensible de lo normal o porque no lo estás haciendo de la forma correcta. Si te encuentras en esta situación muy a menudo aquí encontrarás la solución sobre cómo proteger la piel antes y después del afeitado y así evitar rojeces e irritaciones. Te mostramos como afeitarte en pocos pasos con los productos adecuados para decirle adiós a la irritación post afeitado y dejar de preocuparte por cómo evitar la irritación después del afeitado.

Humedece el rostro con agua caliente. Una buena opción es afeitarse después de la ducha, ya que el agua caliente ayuda a dilatar los poros y a eliminar las células muertas y restos de grasa haciendo que la cuchilla se deslice con mayor facilidad.

Utiliza la cantidad de producto de afeitado que necesites. No escatimes en gel o espuma de afeitar de esta forma evitarás cortarte y reducirás la irritación de la piel. Antes de afeitarte espera a que el producto haga su efecto durante unos minutos.

Cuida tus herramientas de afeitado. Procura mantener en perfectas condiciones tus herramientas de afeitado, en especial las cuchillas. Cámbiala cuando notes tirones o molestias ya que si está desgastada puede irritar la piel o producir cortes indeseados.

Pasa la cuchilla en la dirección correcta con pasadas ligeras. Si te afeitas en la misma dirección en la que crece el vello podrás reducir la agresividad de las cuchillas sobre la piel. Además haz la pasadas sin hacer demasiada presión ya que la piel de la cara es muy sensible y podrías provocar ardor o incluso cortes.

Enjuaga con agua fría. Para retirar los restos del afeitado es mejor que lo hagas con agua fría, así cerrarás los poros y sentirás una gran sensación de alivio. Además es importante que cuando te seques no frotes la toalla con fuerza sino que lo hagas dando pequeños toques.

Usa un buen after shave. Si tu piel es sensible, lo mejor es que optes por una loción para después del afeitado que sea lo más natural posible. Este tipo de after shave deben incluir entre sus ingredientes aloe vera, aceite de almendras o karité.

Reduce las pasadas de la cuchilla. Se recomienda pasar la hojilla solo las veces que sean necesarias, evita pasar demasiadas veces por la misma zona si ya está afeitada totalmente.

Usa máquina eléctrica si te afeitas a menudo. Este tipo de maquinillas suelen llevar cuchillas de mayor calidad que las cuchillas desechables por lo que irritan menos la piel después de muchos usos. Son perfectas para conseguir mejores acabados, más suaves y de una forma más cómoda.