El vestido, los zapatos, el peinado, el maquillaje… Si te casas este año seguro que tienes en mente todas esas cosas, entre otras tantas, pero ¿y tú?, ¿y tu piel? Igual de importante es tener la piel libre de imperfecciones y perfecta para el día B, así te sentirás más segura, más guapa y lucirás un maquillaje mucho más bonito sobre una piel tersa, lisa y sana.

Ahora sí que sí, toca seguir la rutina facial a rajatabla para llegar con una piel perfecta al día de tu boda. ¿Y cómo era eso? Si te casas este año seguro que tienes mil cosas en la cabeza, así que toma nota, ahora estás a tiempo de conseguir la piel perfecta y cuanto antes empieces ¡mejor!

rutina para un rostro perfecto el día de la boda

Limpia, tonifica e hidrata mañana y noche con cosméticos faciales.

Tras lavarte la cara por la mañana, aplica un tónico para regular el pH de tu piel, y después hidrata tu rostro. Lánzate a por un sérum que aporte un extra de hidratación, luminosidad y jugosidad a tu piel, así no tendrás una cara apagada y ganarás en juventud. Por último, utiliza una crema hidratante con protector solar para estar protegida a diario de los rayos solares, incluso los días nublados o por poca exposición que tengas.

Ingredientes que debes incluir en tu rutina de mañana: Vitamina C y ácido hialurónico como antioxidantes y portadores de luminosidad. Los encontrarás en sérums e hidratantes. No te olvides de aplicar después un protector solar.

Por la noche, desmaquilla y limpia. Es súper importante irse a la cama con la cara lavada y bien limpita, sin restos de maquillaje, ni cosméticos. Por el día, nuestra piel sufre por los rayos UV, la polución, el frío, el viento… Y por la noche es cuando nuestras células se regeneran, por eso es tan importante que la piel esté libre de impurezas y así pueda respirar y regenerarse por la noche sin problema. Una vez esté limpia, aplica el tónico, el sérum y la crema hidratante de noche acorde con tu tipo de piel: mixta, seca, grasa, normal…

Ingredientes que debes incluir en tu rutina de noche: Retinoides y Alfa Hidroxiácidos como el ácido glicólico. Con tratamientos que contengan estos ingredientes favorecerás la renovación de piel gracias al efecto peeling, actuando contra manchas y arrugas.

Una vez a la semana aprovecha para mimarte un poquito más. Exfolia tu rostro y si tienes la piel seca, aprovecha para utilizar una mascarilla facial nutritiva e incluye ingredientes como las ceramidas cuando la fecha de la boda esté a la vuelta de la esquina.

pasos para tener la piel del cuerpo a punto para la boda y la luna de miel

Cuida tu cuerpo con dos sencillos pasos: Hidratación diaria y exfoliación semanal con los cosméticos corporales adecuados.

Hidrata tu cuerpo todos los días después de ducharte. Parece que al cuerpo le damos menos importancia a la hora de hidratar, pero no le quitemos la relevancia que se merece. Si se te suele olvidar hidratarte el cuerpo o te da pereza, echa mano de las lociones hidratantes para debajo del agua; así te podrás hidratar bajo la ducha sin poner excusas: limpia e hidratada antes de secarte. Escotes en V, escotes en la espalda, vestidos sin mangas… motivación más que necesaria para aportar hidratación a cada parte de nuestro cuerpo.

El segundo paso es exfoliarse el cuerpo una vez a la semana. Con la exfoliación favorecerás la circulación y reducirás la retención de líquidos, disminuyendo así la celulitis. Además, renovarás las células y tu piel estará mucho más suave y tersa.

No te olvides de hidratar tus manos y tus pies con cremas específicas. Prepara tus manos para recibir la alianza, aparte de con una manicura ideal, con unas manos hidratadas y suaves. Lo mismo ocurre con los pies, antes de lucir pedicura con tus sandalias de boda o en la luna de miel, hidrátalos bien después de la ducha, una vez estén bien secos.

Por supuesto, los tips básicos y necesarios para una piel perfecta son: dormir las horas necesarias, hidratar el cuerpo bebiendo 1’5L de agua mínimo al día, comer saludable, evitar a toda costa el tabaco y el alcohol, y tener cuidado con la exposición solar, mejor en pequeñas dosis y siempre bien protegida con SPF.