20 Jun Cómo combatir el acné en hombres

El acné no es solo cosa de adolescentes, puede afectar a personas de todas las edades, incluidos los adultos. Los hombres pueden experimentar brotes a lo largo de su vida, especialmente durante periodos de estrés o cambios hormonales. Afortunadamente, existen diversas formas de combatir el acné siguiendo una correcta rutina de cuidado de la piel y así como algunos hábitos saludables.

Causas del acné en hombres

El acné se desarrolla cuando los poros de la piel se obstruyen con grasa, células muertas y bacterias. Además hay varios factores específicos que pueden contribuir al acné en los hombres:

Hormonas: Los niveles de testosterona tienden a ser más altos en los hombres, lo que puede aumentar la producción de sebo en la piel. Este exceso de sebo puede obstruir los poros y provocar brotes de acné.

Genética: La predisposición genética juega un papel crucial en el desarrollo del acné. Si tienes padres o hermanos que han sufrido de acné, es más probable que tú también lo experimentes.

Higiene personal: Aunque el acné no es causado directamente por la suciedad, una higiene deficiente puede empeorar esta condición. No limpiar adecuadamente la piel puede permitir que el aceite y las células muertas se acumulen y obstruyan los poros.

Estilo de vida: El estrés, la dieta y los hábitos de sueño también pueden influir. El estrés puede aumentar la producción de hormonas que estimulan la producción de grasa. Una dieta rica en alimentos procesados y azúcares puede agravar el acné.

Productos de afeitado: El afeitado puede irritar la piel y, si se usan productos inadecuados, pueden obstruir los poros. Las cuchillas sin afilar o las técnicas de afeitado incorrectas también pueden contribuir al problema.

Cómo combatir el acné en hombres

Mantén una buena higiene: Lava tu rostro regularmente y no toques tu cara con las manos sucias. Evita explotar o tocar los granos, ya que esto puede causar más inflamación y cicatrices.

Elige productos de cuidado de la piel apropiados: Usa productos etiquetados como «no comedogénicos» o «libres de aceite» para evitar obstruir los poros.

Adopta una dieta saludable: Una dieta balanceada rica en frutas, verduras y granos enteros puede mejorar la salud de tu piel. Limita el consumo de alimentos procesados, azúcares refinados y lácteos si notas que agravan tu acné.

Maneja el estrés: Practicar técnicas de manejo del estrés como el yoga, la meditación o el ejercicio regular puede ayudar a reducir los brotes de acné inducidos por el estrés.

Hidrata tu piel: Incluso si tienes piel grasa, es importante mantenerla hidratada. Usa un hidratante ligero y no comedogénico para evitar que la piel se vuelva demasiado seca y produzca más aceite.

Consulta a tu dermatólogo: Si el acné persiste o empeora, es crucial buscar la ayuda de un dermatólogo. Un especialista puede proporcionar un plan de tratamiento personalizado y monitorear tu progreso.

Rutina para piel con acné

Una rutina de cuidado de la piel adecuada es esencial para combatir el acné. Aquí te damos algunos pasos clave: